De las presentadoras de Fox a sus familiares pasando por sus asesoras, The Chiara Boni La Petit Robe copa el fondo de armario del séquito femenino de Donald Trump. Las razones de este vínculo tienen que ver con lazos amistosos, pero también con una estética hiperfemenina que se ensalza desde el bando republicano.
Las mujeres del séquito de Donald Trump se caracterizan por tener una estética casi clónica: Melenas oxigenadas, pestañas infinitas, tallas que jamás superan la 38, un bronceado impecable y un fondo de armario repleto de vestidos hiperfemeninos de colores vivos. Pudiera parecer que para formar parte del ‘team Trump’ hiciera falta pasar por un casting estético y lucir una suerte de uniforme en el que la marca estrella es The Chiara Boni La Petite Robe, adorada por las estrellas de la televisión americana, especialmente las presentadoras de Fox News, el canal de noticias preferido de Trump.
¿Tendrán también que lucir un look determinado las mujeres que forman parte del equipo del presidente? ¿Existe un dress code con sello Trump?
Mientras que muchas marcas han rechazado sin tapujos su política y otras se aseguran de no subir a sus redes sociales ninguna imagen que deje constancia de que Melania Trump ha apostado por la marca en cuestión, The Chiara Boni La Petite Robe se caracteriza por publicar con orgullo en sus redes imágenes de las mujeres que apoyan a Trump enfundadas en sus diseños.
Pero, ¿por qué aman Ivanka Trump y Kayleigh McEnany, comentarista política que desde el mes de abril es la nueva secretaria de Prensa de la Casa Blanca, los diseños de esta firma americana? Para comenzar, porque sus creaciones realzan la silueta y se convierten en una apuesta segura para acertar dentro del ámbito laboral. Los vestidos están confeccionados con un tejido que no necesita ser planchado y que se adapta al cuerpo como un guante, por lo que la funcionalidad y su fotogenia son otras de sus claves. De hecho, la mismísima Oprah Winfrey encargó nueve diseños de la marca en diferentes colores para posar en la portada de la revista ‘O, the Oprah Magazine’. Incluso Dita von Teese, experta en siluetas bodycon, es también fan de la firma.
Por más que Chiara Boni, directora creativa de la marca, intenta mantenerse al margen de la política, Anthony Vecchioni, dueño del showroom de la firma en Los Angeles, es amigo de Jeanine Pirro (jueza republicana), Lara Trump (nuera del presidente) y Kimberly Guilfoyle (asesora del gobierno); una amistad de la que presume en sus redes sociales al subir fotografías con ellas enfundadas en vestidos de la marca, que por supuesto, etiqueta pertinentemente. Vecchione acude a las fiestas que organiza Donald Trump y se convierte en uno más de su séquito, consciente a su vez de que las mujeres con las que se codea son las mejores clientas de la firma a la que representa.
Cuando el medio republicando Reactionary Times entrevistó a la diseñadora y le preguntó acerca de las fans de la firma, haciendo alusión a sus posturas políticas, Chiari lanzó balones fuera. “Mi forma de entender la moda es políticamente correcta. No excluyo ninguna talla ni a ningún pensamiento”.
Mientras que Gucci se aseguró de declarar que el que Kellyanne Conway vistiera de la marca era algo que no podían controlar, The Chiara Boni La Petite Robe presume de que las mujeres que apoyan a Trump apuesten por sus diseños. “Yo acepto a cualquier mujer que compra la marca. Vestimos a la derecha, a la izquierda y a todas las que se encuentren en el medio”, asegura por su parte Vecchione a The Washington Post. Mientras, en sus redes sociales comparte imágenes en las que posa junto a Lara Trump, a la que conoció antes de que contrajera matrimonio con el hijo de Donald Trump, Eric, y que no se pierde los desfiles de la marca desde el front-row. En resumidas cuentas, podríamos decir que Vecchione es el Derek Blasberg de la política, pues mientras que Derek se codea con las modelos más relevantes de la industria y aparece en los perfiles de Instagram de cada una de ellas, Anthony Vecchioni posa junto a las mujeres del equipo de Trump como si fuera parte del mismo.
No sabemos si las mujeres del equipo de Trump cuentan con unas normas de estilo predefinidas ni si el que Vecchioni sea íntimo de la familia ha hecho que la marca sea la preferida de las mujeres que trabajan junto al presidente, pero lo que queda claro es que si hace años al ver a una celebridad enfundada en un vestido entallado era muy probable que se tratara de un Hervé Leger, si vemos ahora a una mujer del equipo de Trump lucir un diseño bodycon de colores vivos, es muy probable que se trate de un vestido de The Chiara Boni La Petite Robe.
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